04 feb. 2022

Por definición, un denunciante es un individuo que “revela algo encubierto o que informa contra otro”. El histórico de este tema entro en vigor con más ruido en la Industria Alimentaria con la V8 de BRCGS, bajo el requisito 1.1.6: “La empresa deberá contar con un sistema de información confidencial, que permita al personal comunicar problemas relacionados con la seguridad, integridad, calidad y legalidad del producto…”

Publicado por SAI Global, actualmente perteneciente al Grupo Intertek. Leer más


 

Asimismo, hay una Directiva de la UE sobre denuncia de irregularidades, que también abarca las industrias de seguridad alimentaria y garantía de la cadena de suministro. La Directiva (UE) 2019/1937 es una normativa destinada a la protección de las personas que informen sobre infracciones en el seno interno de las empresas pertenecientes a la Unión Europea. Esta directiva establece, entre otras cuestiones, nuevas exigencias para las empresas en la creación de un canal de denuncias interno, y en la protección de los denunciantes para que no se puedan tomar represalias por sus denuncias.

Además, En noviembre de 2010, el Congreso de Estados Unidos aprobó la Ley de Modernización de la Seguridad Alimentaria (FSMA) de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA), que impone estrictos estándares de inocuidad alimentaria y otorga a la FDA mayor autoridad para regular los alimentos contaminados. La ley garantiza que los trabajadores puedan revelar sus preocupaciones sobre la inocuidad alimentaria sin temor a represalias por parte de sus empleadores (FDA Food Safety Modernization Act, 21 U.S.C. § 399d). La ley fue aprobada para ayudar a evitar la contaminación de alimentos que conduzca a enfermedades y muerte.

Los empleados que manipulan alimentos están en la mejor posición para garantizar que se mantengan los estándares e informar cualquier problema o “algo raro”, ya que son la primera línea de la elaboración de alimentos. Las leyes alientan a los empleados a hablar cuando ven algo fuera del protocolo y garantiza que sus empleadores no los castigarán por hacerlo.

Para alguien que es nuevo en denunciar, puede resultar abrumador si no está seguro de cuáles son sus derechos o si otras personas dentro de su organización han optado por permanecer en silencio por temor a represalias.

Hay diversos casos de denuncia de irregularidades en la industria alimentaria, que nos han hecho aún más conscientes de la necesidad de denunciar cuando se produce un comportamiento peligroso o ilegal.

Los ejemplos incluyen a la inspectora de alimentos jubilada del USDA, Phyllis McKelvey, quien sacó a la luz tanto el daño a los trabajadores como a los animales (Petición · Scabs, Pus, and Feces in Chicken? USDA, Keep It Off My Plate! · Change.org), o la inspectora federal de carne Jill Bauer, quien presentó quejas sobre el Sistema de Inspección Porcina, en USA (Inspectors warn unsafe pork could make its way to consumers under Trump rule change (nbcnews.com)

Es una buena idea que las organizaciones incluyan en sus políticas y procedimientos sobre la denuncia de irregularidades como parte del programa de incorporación de nuevos empleados. Este enfoque sienta las bases para los nuevos empleados y les ayuda a ver que la empresa valora la integridad y la transparencia.

En un estudio reciente (Neal, 2019) se reclutó una muestra de 734 manipuladores de alimentos de la industria de servicio de alimentos y 306 manipuladores de alimentos de la industria de procesamiento de alimentos. Se llevó a cabo un proceso psicométrico de dos pasos para validar la escala y se utilizó un modelo de mediación moderado para examinar los mecanismos a través de los cuales la formación en seguridad alimentaria influye en la denuncia de irregularidades. Los resultados mostraron que la satisfacción laboral y la autoeficacia mediaban plenamente la relación entre la formación y la denuncia de irregularidades. Los resultados indican la influencia de los programas de formación en seguridad de los alimentos en los comportamientos de denuncia de irregularidades, así como también sugieren otros métodos para mejorar la denuncia de irregularidades de los empleados a través de la gestión de recursos humanos.

En caso de que haya un momento en el que tenga que “hacer sonar el silbato”, es una buena idea hablar con un profesional de confianza, manteniendo la confidencialidad de la organización y las personas involucradas. Recuerde priorizar la seguridad del personal, especialmente la salud mental.

Debemos pasar de simplemente autorizar la denuncia de irregularidades a facilitarla para que los empleados no solo se atrevan a presentar su información, sino que consideren que es su obligación moral hacerlo. En empresas donde se ejerce el acoso psicológico y una cultura del miedo, y en países donde no existe protección para los denunciantes, hay pocos incentivos para que los denunciantes potenciales revelen sus inquietudes, ya sea interna o externamente.

Cuál es la estrategia de su empresa en este tema? Si es un simple “buzón+formación” se quedará corto en la gestión adecuada y eficaz, y los animamos a que realicen un buen análisis de causa raíz para entender por qué, si ese es su sistema actual, luego de 4 años aun no han recibido ni un comentario.

Leila Burin

Experta en Seguridad Alimentaria